Diseño de marcas

Siempre hemos escuchado o visto los logotipos que podemos encontrar por cualquier medio de creación de imagen, pero debemos diferencarlos de otros conceptos como imagotipo, isotipo e isologo. Veamos las diferencias:

Los logotipos son generalmente símbolos que representan las marcas de empresas, productos, etc. Son imágenes compuestas sólo por letras o tipografía en las que casi siempre aparece el nombre de lo que representan, abreviado o entero. Su forma, sus colores, se corresponden con el tipo de empresa, etc.; de este modo cualquiera que lo ve, asocia el logotipo a la actividad que desarrolla esa empresa o al tipo de producto. Ejemplos:

Los imagotipos son imágenes en las que aparecen, además de letras, una representación pictográfica que puede ser figurativa o abstracta, de modo que nos encontramos con una parte de la imagen que podemos leer y otra no. Ejemplos:

Los isotipos son representaciones, figurativas o abstractas, en las que no aparecen ningún texto o tipografía aunque sabemos qué representa. Ejemplos:

Y por último, los isologos, o isologotipos, son aquellos que engloban en un mismo elemento imagen y texto Ejemplos:

Todas estas imágenes globales de empresas o de productos reúnen una serie de características a tener en cuenta:

1. Que sean simples porque la simplicidad permiten que sean fácilmente reconocibles usando pocos colores y de tipografía fácil de leer.
2. Que sean memorables y atemporales de modo que sean recordados ahora y para siempre.
3. Y que sean apropiados según la característica de la empresa o producto.

Para comprender el proceso de construcción de estas marcas, un video tutorial...

Recordamos la importancia de usar unas plantillas o recursos para ayudarnos a diseñar nuestras propias marcas.

El origami o papiroflexia

El origami o papiroflexia es un arte que consiste en el plegado de papel sin usar tijeras ni pegamento para obtener figuras de formas variadas, muchas de las cuales podrían considerarse como esculturas de papel. En un sentido específico, el origami es un tipo de papiroflexia de origen japonés que incluye ciertas restricciones, (por ejemplo, no admite cortes en el papel y se parte desde ciertas bases) con lo que el origami es papiroflexia, pero no toda la papiroflexia es origami. 

La particularidad de esta técnica es la transformación del papel en formas de distintos tamaños partiendo de una base inicial cuadrada o rectangular que pueden ir desde sencillos modelos hasta plegados de gran complejidad. 

Para realizar con esmero y correctamente la técnica del origami o papiroflexia, debemos seguir las siguiente reglas:

1. Trabajar siempre con pulcritud y esmero.
2. Todos los dobleces y pliegues deben hacerse con exactitud, por lo que se aconseja trabajar sobre una superficie lisa y sólida.
3. Repasando los dobleces y pliegues con la uña del pulgar, éstos se marcarán mejor, consiguiendo así que los siguientes pasos resulten más fáciles.
4. Cuanto más cuidado se ponga en los dobleces, más bonita resultará la obra concluida.
5. Seguir escrupulosamente los pasos de trabajo según el orden indicado. 
6. No debe omitirse ningún paso. Por eso debe tenerse siempre en cuenta el paso anterior y posterior.
7. Respetar todas las indicaciones, por ejemplo, en qué dirección deberá doblarse una esquina, cómo plegar la figura, cómo abrirla o cómo desdoblar una doblez, etc.
8. Respetando exactamente todas las reglas e indicaciones, y haciendo los dobleces limpia y esmeradamente, tanto más disfrutaréis con los resultados obtenidos.

Si quiere saber más, accede al siguiente enlace sobre el origami o papiroflexia.

En YouTube hay muchos vídeos tutoriales para conseguir simpáticas figuras de papel con muy pocos materiales:

Y muchos más que podemos encontrar por Internet para conseguir estás increíbles figuras...

¿Te anima a crear algunas figuras en papel?

El cartel

El cartel es un anuncio gráfico que consta de imagen y texto con el fin de que la comunicación visual y verbal se complementen consiguiendo un mensaje claro y preciso. A la hora de realizar el cartel debemos tener en cuenta los elementos que lo conforman para tratar de convencer al público.

IMÁGENES: Son lo primero que llama la atención y suelen ser fotografías, pues tienen más credibilidad, aunque también se pueden utilizar ilustraciones o dibujos teniendo muy en cuenta los siguientes aspectos: 

Forma: Las formas utilizadas deben ser sencillas, aunque expresivas. Las formas geométricas son las más llamativas, por tanto es conveniente utilizarlas o utilizar imágenes cuyo esquema formal sea muy simple o con tendencia a la forma geométrica.

Color: El color ha de tener incidencia en el conjunto, teniendo en cuenta las leyes de contraste y basándose en las siguientes características:

    Que tenga mucha luz
    Deben predominar los tonos claros y superiores en el círculo cromático: amarillo, naranja...
    Deben utilizarse tintas planas.
    Utilizar pocos colores, vivos y lo más puros posible.
    Aprovechar los contrastes para resaltar el producto.

Composición: La composición es muy importante, pues depende de la distribución de los elementos, que estos consigan una mayor unidad expresiva.

TEXTO:  Ha de estar integrado perfectamente en el resto del cartel. Letras claras y espaciadas. El tipo de letra se adaptará al resto del cartel: Cartel informal, letra informal; cartel clásico, letra clásica; etc... Aplicar a las letras las mismas leyes que al color sobre contraste, relieve, peso, penetración, etc... Resaltar las palabras o frases más importantes con letra más grande y color distinto. Evitar la monotonía en la colocación y colocar el texto en el lugar idóneo para que cumpla su función. 

A continuación, les ofrecemos algunos ejemplos ilustrativos de cómo hacer un cartel:

Orientaciones para hacer un cartel de Inma Contreras

El Cartel de Lucía Alvarez

Y como ejemplos, pueden encontrar muchos modelos de cartel en el Museo Nacional de Arte de Cataluña.